Tras vencer a Tala RC de Córdoba por 20 a 10, Hindú volvió a festejar en la Catedral del Rugby argentino, y logró su 8vo título del ICBC Nacional de Clubes. Pieza fundamental de muchos de esos campeonatos (y de este, también), fue Gonzalo Delguy, quien destacó a la defensa de su equipo por sobre todas las cosas.
La batalla entre los delanteros en cada rincón de la cancha fue descomunal. Quien hoy se desempeñó como octavo del campeón, dijo: «Estoy muy contento por el resultado». En efecto, en el segundo tiempo el blanco-y-negro se mostró más agresivo, e intentó mantener viva la pelota, generando muchas situaciones de asedio contra el ingoal rival. Por eso, el «gato», aclaró: «Nos tocó defender mucho, defendimos bien, y cuando tuvimos que marcar, marcamos. Trajimos las pelotas importantes, y administramos el partido con la defensa.»
Con una emoción imposible de contener, el ex medio scrum y hoy actual entrenador de Hindú, Nicolás Fernández Miranda, habló una vez finalizado el partido: «Lo soñado es ganar», comenzó diciendo. «Gracias a los jugadores, gracias al club, a todos los que nos trajeron hasta acá. Contento y emocionado.»
Una final con todo el condimento: Color, emoción, paridad en el juego, dureza entre los forwards y velocidad en los backs; no faltó nada. «La verdad, que como dijo el ruso (Lucas) Ostiglia, era el partido más importante de la historia del club de los últimos tiempos. Los chicos jugaron increíble, con convicción, amor y pasión».
Para finalizar, Fernández Miranda sentenció: «(el amor y la pasión) es lo que siempre manda y que ojalá nunca perdamos».
Lo cierto es que -algo que tanto el entrenador como el jugador dijeron-Hindú se hizo fuerte a través de su personalizad, su corazón, y la defensa.
