La segunda semana de entrenamientos de Los Pumas ya está en marcha. El plantel continúa entrenando en Casa Pumas, con los jugadores divididos en dos turnos y, a su vez, en diferentes grupos de trabajos para respetar el distanciamiento social y las medidas de higiene necesarias, tanto en la campo de juego como en el gimnasio.
Matías Orlando, uno de los tucumanos convocados, se incorporó al plantel el sábado pasado y remarcó: “Poder volver a entrenar con el grupo está buenísimo. Tenemos protocolos y pasos para dar en función de cuidarnos y es por lo que tenemos pasar hoy. Pero poder empezar a movernos es muy bueno”.
“Por suerte pasé la cuarentena en Tucumán donde se permitió practicar al aire libre y pude llevar adelante los trabajos que nos mandaban los preparadores físicos”, explicó el centro.
Acerca de su recuperación, Orlando agregó: “El hombro lo estoy sintiendo bien, todavía no hago nada de contacto porque no podemos hacerlo en esta primera etapa. Los primeros meses después de la cirugía, con la pandemia los kinesiólogos no podían trabajar así que esa etapa me llevó un poco más de tiempo. Ahora ya me encuentro entrenando a full para ponerme a tono”.
Remontándose a los primeros trabajos con Los Pumas de manera virtual por el aislamiento, el tucumano dijo: “A pesar que la convocatoria y los primeros entrenamientos fueron por Zoom, no dejamos de ser Los Pumas. En esos primeros tiempos se trabajó con el staff en cómo iba a ser la forma de trabajo y los planes a futuro con Francia 2023 como el objetivo a largo plazo y principal”.
“En caso de jugar el Rugby Championship, vamos a llegar de la mejor manera posible. No podemos cambiar nada de la realidad. Nosotros tenemos que poner la cabeza en lo que podemos manejar. Hay cosas que no dependen de nosotros, como el torneo que todavía no se oficializó, pero como dije, nosotros tenemos que enfocarnos en lo que podemos controlar”.
Con el futuro aún sin definir en cuanto a las competencias para Los Pumas, el entusiasmo y las ganas, motivan a todos por igual. “La oportunidad de jugar la tenemos todos. Hoy podemos entrenar en grupos reducidos y tenemos que dar todo».
“Los más chicos que veo todos los días en mi turno de entrenamiento tienen un empuje y ganas bárbaras”, resalta el jugador formado en Huirapuca.
“Para los más grandes está bueno porque los chicos empujan a seguir dando todo. Los primeros días fueron de mucha alegría, contar anécdotas de esta cuarentena y como la pasó cada uno. Somos un grupo joven y nos divertimos mucho.
El presente marca una realidad distinta en los entrenamientos y respecto a los protocolos, Orlando señala que: «Lo tomamos con mucha responsabilidad, sabemos lo que implica hoy esta situación. Nos cuidamos mucho, tanto en los entrenamientos como cuando volvemos a casa. La continuidad de poder seguir entrenando y preparándonos dependen de que no haya contagios, por lo tanto cada jugador tiene que ser responsable”.