En una final muy reñida, el Seleccionado de UROBA venció a Buenos Aires por 17 a 14 y se quedó con el Torneo Nacional de Desarrollo para Menores de 16.
El certamen disputado en Pergamino se ha convertido en un evento de suma importancia para el rugby en desarrollo en nuestro país, y en esta cuarta edición dejó en claro que las 16 uniones participantes han logrado compartir, más allá de la competencia, una experiencia invalorable para jugadores y staff.
“Es muy enriquecedor poder compartir con los staff y sus jugadores porque vienen de distintas localidades y cada uno comparte sus vivencias y esfuerzos para poder jugar al rugby. Por lo que me han comentado compañeros míos de la UAR, en años anteriores, es impresionante ver el esfuerzo que cada unión hace para que esto se concrete de la mejor manera posible”, sostuvo el actual presidente de Competencia y actual vicepresidente de la Unión Argentina de Rugby, Gabriel Travaglini.
Luego agregó: “También tengo referencias de lo llamativo que es ver lo que crece este club año a año. Se nota que la gente está muy comprometida con la organización del evento y lo toman como uno de los más importantes de todo el año”.
La presencia de 16 uniones con sus equipos conformados por jugadores en desarrollo o de clubes de tercer nivel forma parte del principal objetivo que tiene la UAR para este tipo de competencias. Así lo refleja Travaglini, quien preside la Comisión de Competencias.
“Es un torneo que busca motivar a los clubes. A los dirigentes y a los jugadores de este nivel para que participen de un evento muy importante a nivel nacional, y para que conformen sus divisiones juveniles, ya que, en este nivel de clubes, según las estadísticas que manejamos, es un nicho que está para crecer muchísimo”, sostuvo Travaglini.
Por último, al ser consultado sobre las expectativas para esta edición, se mostró optimista y destacó el esfuerzo realizado por UROBA en el aspecto organizativo: “Las expectativas para esta edición son las mejores. Es el cuarto año que se hace este torneo y en este caso, con la colaboración en la organización de la Unión de Oeste de Buenos Aires. La experiencia recogida hasta ahora es muy buena y se percibe una evolución año a año en el nivel de juego de estos equipos. Además, también vemos que más allá del juego, el torneo deja un legado a cada delegación lo cual es uno de los objetivos principales que nos proponemos», finalizó.
